INTRODUCCIÓN
Dios
gobierna a su universo por la ley. La propia naturaleza funciona bajo su
gobierno providencial. Las así denominadas leyes de la naturaleza son simples
descripciones de la manera normal que Dios tiene de ordenar su universo. Estas
"leyes" son expresiones de su voluntad soberana.
Dios
no le rinde cuentas a ninguna ley fuera de sí mismo. No existen normas cósmicas
independientes que obliguen a Dios a obedecerlas. Por el contrario, Dios es su
propia ley. Esto decir que Dios actúa de acuerdo con su propio carácter
moral. Sin propio carácter no es solo moralmente perfecto, sino que es
el patrón estándar de la perfección. Sus acciones son perfectas porque su
naturaleza es perfecta, y Él siempre actúa de acuerdo con su naturaleza. Por lo
tanto, Dios nunca es arbitrario, caprichoso o antojadizo. Siempre hace lo que
es correcto.
Como
criaturas de Dios, a nosotros también se nos exige que hagamos lo que es
correcto. Dios nos exige que vivamos una vida de acuerdo a su ley moral, la
cual nos ha revelado en la Biblia. La ley de Dios es el estándar de justicia y
la norma suprema para juzgar el bien y el mal. Dios tiene la autoridad para
imponernos obligaciones, para exigir nuestra obediencia, y exigir el compromiso
de nuestras conciencias, porque Él es nuestro soberano.
También
tiene el poder y el derecho para castigar la desobediencia cuando violamos su
ley. (El pecado puede ser definido como la desobediencia a la ley de Dios.)
Algunas
leyes de la Biblia están directamente basadas en el carácter de Dios. Estas
leyes reflejan los elementos transculturales y permanentes de las relaciones,
tanto divinas como humanas.
Otras
leyes obedecieron a condiciones pasajeras de la sociedad. Esto significa que
algunas leyes son absolutas y eternas, mientras que otras pueden ser anuladas
por Dios por razones históricas, como las leyes ceremoniales y de
dieta de Israel. Solo Dios puede abolir dichas leyes. Los seres humanos nunca
tienen la autoridad para abolir la ley de Dios.
No
somos autónomos. Es decir, no se nos permite vivir de acuerdo con nuestra
propia ley. La condición moral de la humanidad es la de heteronomía: vivimos
bajo la ley de otro. La forma específica de heteronomía bajo la cual vivimos es
la teonomía, o la ley de Dios.
RESUMEN
1.
Dios gobierna al universo por leyes. La gravedad es un ejemplo de las leyes de
Dios para la naturaleza. La ley moral
de Dios está en los Diez Mandamientos.
2.
Dios tiene la autoridad para imponer obligaciones a sus criaturas.
3.
Dios actúa de acuerdo a la ley de su propio carácter.
4.
Dios nos revela su ley moral a nuestras
conciencias y en la Escritura.
5.
Solo Dios tiene la autoridad para abolir sus leyes.
PASAJES BÍBLICOS PARA LA REFLEXIÓN
Éxodo
20:1-17, Salmo 115:3, Mateo 5:17-20, Romanos 7:7-25, Gálatas 3:23-29